Puede que durante el día sientas que comienzas con mucha energía pero, a medida que las horas transcurren, ya las baterías se van agotado, no duran hasta el final del día.

En cualquier momento y a cualquier edad, la fatiga aflige a todos. Sin embargo, asumiendo que su médico haya descartado causas médicas graves, hay algunos pasos básicos que se pueden puede tomar para recargar de nuevo las baterías.

De acuerdo con el informe especial realizado por la la escuela de medicina de la Universidad de Harvard, el incremento de la fatiga es un síntoma, no una enfermedad. Éste se experimenta de manera distinta por diferentes personas. Puede darse la fatiga por estrés o falta de sueño, que  suele disminuir después de una buena noche de descanso, mientras que otra fatiga es más persistente y puede ser debilitante incluso después de un sueño reparador.

En este informe especial que lleva por nombre  “Boosting Your Energy” la escuela de medicina de Harvard proporciona consejos e información de expertos médicos de renombre mundial que pueden ayudar a descubrir la causa de la fatiga y a encontrar el tratamiento adecuado o los cambios que son necesarios en el estilo de vida para mejorar. Sin embargo, acá adelantamos 4 maneras en la que los expertos de Harvard aconsejan que se puede incrementar los niveles de energía.

 

1.- Tómese las cosas con calma. No se sobrecargue de trabajo. Probablemente sea usted ambicioso y quiera seguir adelante pese a comenzar a sentir los síntomas del cansancio. No corra el riesgo de sobrecargarse. En lugar de quemar toda la “vida útil de la batería” en dos horas, distribúyala entre las tareas matutinas, las actividades de la tarde y las nocturnas, con descanso y comidas entre ellas.

2.- Tome un tiempo para dar un paseo o a dormir una siesta. No hay nada más satisfactorio que una siesta corta cuando estás agotado. Ahora bien,  si tiene problemas para dormir por la noche, sepa que dormir la siesta puede empeorar el insomnio. Si ese es tu caso, muévete. Levántate y camina alrededor de la cuadra, realiza un trote suave o, simplemente levántate y muévete. Si no es insomne, disfrute esa siesta de 20 a 30 minutos.

3.- Cuidado con los suplementos alimenticios. Es posible que haya oído hablar de los suplementos que estimulan la energía o de los suplementos “antienvejecimiento”. No hay evidencia de que funcionen. Uno de ellos es el DHEA, por sus siglas en inglés.  No hay evidencia de que éste ofrezca beneficios reales, y los efectos secundarios siguen siendo un signo de interrogación. Otro es el Hierro. Éste sólo mejora la energía si se tiene una deficiencia de este, lo que un médico puede comprobar con un análisis de sangre. De lo contrario, no es necesario que lo tome. Obtener demasiado hierro puede ser perjudicial. Finalmente la Vitaminas B. Es cierto que las vitaminas B (B1, B2, B6, B12) ayudan al cuerpo a convertir los alimentos en la forma de energía que las células pueden quemar, pero tomar más vitaminas B no sobrecarga las células.

4.- Llene el tanque sabiamente. Un pan azucarado de la panadería proporciona muchas calorías, pero nuestro cuerpo tiende a metabolizarlas rápidamente, y entonces podemos terminar con la disminución del azúcar en la sangre – y de allí venir luego la fatiga. Una manera de mantener un nivel de energía más constante es comer proteína magra y carbohidratos no refinados. Pruebe el yogurt con un poco de nueces, pasas y miel. Su cuerpo tomará la mezcla de fibra de carbono y proteína más gradualmente.

Tampoco es recomendable saltarse las comidas. Nuestro cuerpo sólo necesita un cierto número de calorías para pasar el día en el trabajo. Es mejor espaciar las comidas para que el cuerpo reciba la nutrición que necesita durante todo el día.

 

Fuente: Harvard Medical School



via Soy Maratonista http://bit.ly/2HbgvGv

0 comentarios:

Con la tecnología de Blogger.

Newsletter

* indicates required

Artículos Anteriores